-Su aliento rozo mi cuello, crispándome la piel. Esa frase, me hizo recordar demasiadas cosas, hace 2 años atrás, una fiesta de disfraces, alejándome de la casa donde la fiesta se estaba haciendo, la noche estaba despejada y la luna llena alumbraba todo el camino que estaba recorriendo. Las imágenes pasaron, al igual que el tiempo en ellas y me encontré en una camilla, llorando, con las muñecas vendadas. Abrí los ojos, para salir del transe, las manos seguían encarcelando mi cintura. Me giré para directamente, darle una cachetada por haberme hecho recordar todas esas cosas, pero me soltó y se dirigió a la puerta tambaleando, en pijama, para él pijama era tan solo un pantalón de Calvin Klein, de tela negra, sin ninguna remera.
Recordé, … Dave era sonámbulo, sí su nombre era Dave.
Deje el vaso en la mesada, y le quite la mano del picaporte, yo sabía cómo tratar a un sonámbulo, mi primo lo era, y también lo sabía por otras cosas, que me di cuenta que era muy inútil haberlas aprendido.
-Vamos a tu cama. –Con mi brazo rodee su cintura para que dejara de tambalearse, subí las escaleras, ayudando a Dave y cargando todo su peso. Cuando llegue arriba, trate de no hacer ruido, pase por el cuarto donde Frank y Sheyla, dormían. Lo lleve trastabillando a su cuarto, y lo deje en su cama, debía quedarme allí hasta que se duerma. Me senté en el sofá, frente a su cama.
Se levanto dos veces más, a la tercera lo debí sacar del baño, se estaba a punto de bañar con la ropa puesta. Lo tome nuevamente de la cintura, no me daba gracia como debía llevarlo, sino fuera porque estaba sonámbulo, lo hubiese acostado a patadas.
-Dave, vamos acuéstate. –Lo dejé en la cama, y me tironeo junto a él. –Eres muy linda, Jazmin. –Dave, suéltame. –Seguía sonámbulo, pero sabía quien era yo, o estaba soñando.
Dejo sin soltarme, y ya me estaba dando sueño, y me estaba cansando de cuidar a Dave.
-Un mundo ideal, un mundo en el que tú y yo podamos descubrir como vivir sin nadie que lo impida. –Estaba soñando con esa noche. No se debía despertar a un sonámbulo, podía golpearme, aunque eso me encantaría en este momento.
-Ya es suficiente. –Me levante de allí que lo cuide otra, no yo.
-Llegue a la puerta, ya para irme-Tú sabes cómo sigue la frase, dila. –Me gire para verlo, estaba despierto.
-Volví recién, del sueño. Antes de que me golpees.
-Voy a golpearte de todas formas, no lo hice antes por que estabas sonámbulo. –Me acerque a él y le di una cachetada. Su mejilla quedo colorada, y latiendo. Me tomo las muñecas, y no aguante más, al verle a la cara, recordé voy a mudarme, la culpa de eso la tenía él, la persona que yo más … quería, una persona que era … un poco más que Frank. Genial, los ojos ya me ardían, no quería llorar, menos enfrente de él. –
-No, no, no llores. Dime ¿Qué es lo que está sucediendo?, ya no entiendo nada.
-Me senté en el suelo a llorar, levante las piernas y hundí mi rostro en ellas, me rodeo con los brazos, trate de luchar, pero las lagrimas me impedían, cuando lloraba era muy débil. Luego de llorar, por horas, me quede dormida, odie el lugar en donde me dormí. Entre los brazos de Dave.
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Me moví en donde estaba, un lugar cómodo, tapada hasta la nariz, los ojos me pesaban, los abrí y estaba en el cuarto de Dave, me gire y no había nadie. ¿Cómo termine aquí?, no recuerdo nada, solo que termine llorando, en los brazos de … él.
Me levante, escuche el cerrojo, y me di la vuelta, furiosa, me imagine quien podría estar allí.
-No empieces, abre.
-Siempre tan linda. –Cuando me levanto no estoy de humor.
–Cuando te levantas estas muy … sexy
-Mi puño es volador y tienes rostro de aeropuerto. Abré – la –puerta
-¿Podemos hablar? –esta vez lo dijo en un tono más serio. –Si no quieres que grite, abre la puerta.
-No hay nadie en casa, mi hermano y tu amiga, fueron a comprar el desayuno, les dije que te habías ido y luego volvías. Y mis padres no están, por lo tanto estamos solos. –Me acerque a él, insinuando algo, haciéndome pasar por sexy, con el dedo índice le dije que se acercara.
-¿Qué se le ofrece, princesa? –Odiaba que me dijera así. Puse mis manos en su cuello, levanté mi rodilla… y se imaginan lo que hice. Tironee de su cabello, el ya esta revolcándose en el suelo.
-No te me acerques … Aladdin.
-Yo no tengo … la culpa de que te mudes … tú crees que yo me la pase bien … mientras tú estabas internada.
-Si tienes mucho la culpa, si yo hice lo que hice, fue por ti. Hace meses que no cruzamos palabra. Mis padres me creen loca, tengo sueños en los que me asfixio, todo por intentar sobrellevar lo tuyo, llegue hasta un punto de estar internada más de la cuenta, me internaron por depresión, me creía muerta, todo esto me paso por lo que sucedió hace dos años, dos malditos año. Y mi corazón lo recuerda, sabes lo que fue para mí, noches y noches, llorando, por alguien que se fue, que nunca me dijiste porque, luego volviste y ni siquiera me saludaste, las palabras que me dijiste fueron las peores. –Le tiré más fuerte del cabello. –No te va alcanzar la vida, para explicarme, te juro por tu hermano y Sheyla, que te odio.
-Cerré la puerta de un portazo. Y fui al cuarto de Frank, me tape con la colcha, y me arrepentí tanto de lo que le dije, de lo que hice, no es mi culpa que parezca bipolar. Hace dos años, Dave y yo, éramos como uña y mugre, éramos más que ahora con Shey y Frank, mucho más. Íbamos a una fiesta de disfraces, le hice caso a mi nombre y me disfrace de la princesa Jazmine, él fue de Aladdín, solo con el hecho de acompañarme, donde menos fuimos fue a la fiesta, Dave dijo que nos metiéramos por dentro de los árboles, nos sentamos allí, la luna alumbraba, era nuestra propia luz.
-¿Qué sucede? –le pregunte-
-Adiós. -¿Por qué te despides?
-Key no está de acuerdo, con que …
-¿Con? –Lo ayude a que continuara-
-Con que tú y yo seamos amigos. Me iré a donde esta mi hermano, en Inglaterra con Key, y el vendrá aquí. –Key, era su novia, si como ella lo traba a él, podría llamarse NOVIAZGO
-Te irás porque tu novia, no me quiere
-No te quiere cerca de mí y yo la amo, más que a nada.
-se va por otra, comencé a llorar. –De acuerdo, entonces que haces aquí, vestido como Aladdin, vete, vete con ella, no quiere que estemos cerca. VETE.
-Jaz –tomo mi mano y la abrió dejando un papel. –Perdóname
Así paso el tiempo, el se fue a Inglaterra, luego de esa fiesta con 15 casi dieciséis años que tenia, tome alcohol que había en la fiesta, la resaca al día siguiente fue espantosa, pero ya nada me importaba si no tenía a Dave, junto a mí.
No quiero recordar toda las cosas horrendas que hice, alguna pesadilla más tarde me la recordaría, pero no ahora.
El Famoso papel decía:
- Un mundo ideal, un mundo en el que tú y yo podamos descubrir cómo vivir sin nadie que lo impida.
Sabía exactamente como seguía el dialogo:
- Un mundo ideal que nunca pude imaginar, donde ya comprendí que junto a ti el mundo es un lugar para soñar.
Pero no Dave, no puedo seguir si te vas, no puedo soñar si te vas, Este No Es Mi Mundo Ideal, si ya no estás. –me dormí llorando esas palabras.
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